Una alternativa son los arrancadores electrónicos suaves, que usan un dispositivo simple, tal como un triac para retardar el encendido de cada ciclo de tensión y por lo tanto reducir el voltaje efectivo aplicado al motor.
Aparte de un pequeño ahorro de energía durante la rampa de subida, los arrancadores suaves no reducen la energía que consume el motor.
Sin embargo, reducen el desgaste mecánico durante el arranque y la parada, permitiendo el ahorro de energía desconectando los motores con mayor frecuencia.
Muchos arrancadores suaves incorporan actualmente una característica de optimización de energía para proporcionar ahorros energéticos adicionales cuando se funciona durante largos períodos a muy baja carga.
En unidades más grandes, sin embargo, es usual conmutar el arrancador suave una vez que el motor está funcionando en carga para prevenir las pérdidas de potencia de los tiristores o triacs en el equipo.